arriesga

Cuantas cosas debemos ir superando cada día, cuantos límites hemos roto. Debemos dar el cien por cien en todos lo sentidos, sé que a veces hay miedo, yo lo tuve, hasta que una mañana, estaba amaneciendo y pensé ¿Nos complicamos la vida nosotros en realidad?FELICIDAD... esa extraña palabra que no muchos llegan a tener, y los que la tienen son afortunados. De niños soñabamos con ser mayores, quedarnos en el salón a ciertas horas de la mañana porque nuestros padres nos mandaban a la cama, o por ejemplo cuando te decía - No hagas esto! y tú bien que lo hacías... Pero bueno cada año que hemos ido creciendo hemos ido aprendiendo, que hay cosas que no merecen la pena y otras que son realmente bonitas casi imposibles. Bien pues ahora te contaré mi historia, no es una historia cualquiera y me siento orgullosa de ello.
Cuando ya había perdido la esperanza, cuando ya habían jugado con mi corazón como un trapo, como una muñeca de usar y tirar, deje de creer en el amor. Esa extraña sensación que nunca pude sentir, que temía a llegar a sentirla y que me la jugasen de nuevo. Un día, un día cualquiera me arriesgé, tire la toalla y me lanzé al vacío, para a ver si había suerte y podía encontrarlo.. ¡Lo encontré! y sí, ahora por arriesgar y parecer al principio una ''loca'' por volcarme en las locuras, lo encontré, y sé que es él.
Nadie me había hecho sentir tan bien, darme cuenta de lo que soy y de lo que valgo, de que los sueños existen, de que las apariencias suelen engañar y donde menos te lo esperas aparece, nadie me había enamorado de tal manera... y sí ¡Ahora soy feliz!

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